Películas profundamente testimoniales del clima social, político y moral de la España de fines de los años 70 y principios de los 80. Se centran en personajes que experimentan o encarnan las tensiones, contradicciones y conflictos de ese proceso de cambio. Obras como «Solos en la madrugada» de José Luis Garci (1978), «El Diputado» o «El Pico» de Eloy de la Iglesia son claros ejemplos cinematográficos de la época.