El encuentro se realizó este miércoles en el Campus de la Universidad Nacional de Rafaela, con la participación de estudiantes, docentes, nodocentes, investigadores y miembros de la comunidad. La vicerrectora y secretaria de Articulación con la Comunidad, María Cecilia Gutiérrez, destacó la importancia de abrir las puertas de la universidad a toda la sociedad y de fortalecer la extensión universitaria como espacio de encuentro, aprendizaje y crecimiento.

En una jornada cargada de emoción y sentido comunitario, la Universidad Nacional de Rafaela (UNRaf) llevó adelante este miércoles el cierre de las Actividades de Articulación y Bienestar Universitario 2025, en el Campus de la institución. El evento reunió a estudiantes, docentes, nodocentes, investigadores y vecinos que formaron parte de los distintos programas de la Secretaría de Articulación con la Comunidad: +U, deportes y talleres culturales, pasantías, becas de trabajo, futuros profesionales, voluntariados y proyectos de vinculación con la comunidad.
En diálogo con Diario CASTELLANOS, la vicerrectora y secretaria de Articulación con la Comunidad, María Cecilia Gutiérrez, explicó el sentido de esta propuesta que busca consolidar los lazos entre la universidad y su entorno social.
“Hoy hicimos el cierre de las actividades de la Secretaría de Articulación con la Comunidad, que ofrece no solo deportes, talleres culturales, un coro y un montón de propuestas para toda la comunidad de Rafaela y de la región. Tenemos talleres presenciales y también algunos a distancia, como los de fotografía, para que puedan participar personas que no viven en Rafaela”, señaló.
La profesional destacó que este tipo de actividades son fundamentales para ampliar la función social de la universidad pública y fortalecer su vínculo con la comunidad. “La actividad de extensión abre las puertas de la universidad a personas que no necesariamente estudian aquí, pero que vienen a desarrollar capacidades artísticas, culturales, musicales o teatrales. Hoy tuvimos una hermosa muestra donde personas que no son estudiantes de la UNRaf vinieron a presentar las obras y proyectos que desarrollaron a lo largo del año”, expresó.
El encuentro permitió compartir experiencias, aprendizajes y producciones que surgieron de los talleres y programas desarrollados durante 2025. Según Gutiérrez, el cierre fue también una oportunidad para visibilizar la diversidad generacional y social que participa en las propuestas.
“Eso es lo lindo: que personas de distintas edades puedan sentirse parte de la universidad. Hay gente joven, personas mayores, incluso jubilados, que participan y le dan vida a la institución. La universidad no es solo para quienes terminan el secundario, sino para toda la vida. Integrar generaciones y compartir espacios es parte de lo que buscamos desde este trabajo de articulación territorial”, sostuvo.
La vicerrectora remarcó que muchas veces estos talleres son una puerta de entrada al mundo universitario para quienes no habían tenido antes contacto con la UNRaf. “Nos ha pasado que personas que se acercaron por un taller o una actividad artística después decidieron inscribirse en una carrera o retomar sus estudios. A veces es una excusa para reencontrarse con el deseo de aprender y seguir formándose”, comentó.
Finalmente, Gutiérrez destacó el compromiso del área con la renovación permanente de las propuestas y la participación activa de la comunidad universitaria en la organización de los talleres.
“Todos los años pensamos nuevas actividades, tanto presenciales como a distancia, para que puedan participar también quienes viven en otras localidades. Este año incorporamos talleres dictados por estudiantes de la UNRaf, abiertos a toda la comunidad, lo que enriqueció muchísimo la oferta con propuestas jóvenes y frescas. La idea es seguir creciendo, innovando y fortaleciendo este espacio de encuentro que nos une como universidad pública y como comunidad”, concluyó.







